¿Qué es el Camino de Santiago de Compostela?

Alguna vez en tu vida escuchaste esta mítica frase: «algún día quiero hacer el Camino de Santiago«. Se la habrás escuchado a un familiar, a un amigo, a un compañero de trabajo… y, si todavía no habías oído hablar del Camino de Santiago, seguro que tu respuesta fue: «¿Qué es el Camino de Santiago de Compostela?».

Cada persona te explicará de un modo diferente qué es el Camino de Santiago de Compostela. Como especialistas en la organización del Camino de Santiago te decimos que no se puede explicar lo qué es el Camino de Santiago de Compostela. Para saber lo qué es hay que caminarlo, vivirlo y sentirlo. ¡Sólo así sabrás lo que en realidad es el Camino de Santiago!.

¿Qué es el Camino de Santiago de Compostela?

El Camino de Santiago de Compostela no es solo una ruta, sino la denominación que recibe un conjunto de rutas o caminos de Peregrinación Cristiana y, de origen medieval, que te llevan hasta la Tumba de Santiago el Mayor, es decir, hasta la Tumba del Apóstol Santiago situada en la Catedral de Santiago de Compostela. Históricamente siempre se ha conocido como Camino de Santiago el itinerario que parte de los Pirineos y finaliza en la capital de Galicia, Santiago de Compostela. Este itinerario recibe, a día de hoy, el nombre de Camino de Santiago Francés o Camino Francés. El término «Camino de Santiago«, se utiliza a día de hoy para referirse a todas las Rutas Jacobeas existentes.

El Camino de Santiago fue la última Ruta Jacobea en aparecer dentro de las tres grandes Peregrinaciones Cristianas: Tierra Santa, Roma y Santiago de Compostela.

¿Quién es el Apóstol Santiago?

El Apóstol Santiago o, lo que es lo mismo, Santiago el Mayor o Santiago de Zebedeo o Jacobo de Zebedeo fue uno de los apóstoles de Jesus de Nazaret, es decir, de Jesucristo. Fue el primer apóstol que murió martirizado. Cuenta la tradición cristiana que después de la resurrección de Jesucristo el Apóstol Santiago recorrió Hispania (actualmente España y Portugal), comenzando por Gallaecia (Galicia), para llevar a cabo su obra de evangelización.

Viendo que su objetivo no se cumplía, frustrado, decide regresar a Jerusalén. Es allí donde es decapitado por el Rey Herodes Agripa I, dado que este último tenía miedo de que el Apóstol Santiago consiguiese demasiado poder. Son sus discípulos, Atanasio y Teodoro, quienes trasladan su cuerpo en secreto en «una barca mágica» hasta el lugar de su predicación en el norte de España. Desembarcaron en la Ría de Arousa, en Galicia, concretamente en el Puerto de Iria Flavia y amarraron la barca a un «pedrón» mientras pedían permiso para enterrar su cuerpo. El «pedrón» es el que da origen a la Villa de Padrón situada, a día de hoy, en el Camino Portugués. Si vistas la Iglesia de Santiago de Padrón podrás ver el «pedrón», donde se amarró la barca anteriormente citada.

El Puerto de Iria Flavia estaba bajo el Reinado Pagano de la Reina Lupa. Ésta, que estaba totalmente en contra del cristianismo, engañó a los discípulos diciéndoles que unos bueyes transportarían los restos del Apóstol Santiago hasta un lugar seguro. En realidad no eran bueyes, sino toros bravos. Dice la leyenda que en ese momento se produce el milagro: los toros amansaron y la Reina Lupa ante tal acontecimiento pidió bautizarse, para así, convertirse al Cristianismo y el cuerpo del Apóstol Santiago se enterró en un lugar seguro.

Catedral de Santiago de Compostela – Altar Mayor – Apóstol Santiago

Aparición de la Tumba del Apóstol Santiago

Cuenta la historia que, allá por el año 813, un eremita llamado Paio del lugar de Solovio (donde, a día de hoy, está situada la Iglesia de San Fiz de Solovio) durante varios días vio una lluvia de estrellas fugaces en una colina del Bosque Libredón (Liberum Domun). Incluso una noche, en un sueño, se le apareció el Apóstol Santiago y le desveló que el lugar donde estaba viendo las luces era donde se encontraba su tumba. Hasta allí se desplazó Paio y escarbó en la tierra que se había asentado con el paso del tiempo y, efectivamente, descubre la tumba. Comunica su hallazgo al Obispo de Iria Flavia, Teodomiro, y éste a su vez el rey Alfonso II el Casto.

Con el fin de verificar si realmente la sepultura encontrada era la Tumba del Apóstol Santiago, el Rey Alfonso II el Casto, camina desde Oviedo hasta Galicia. A su llegada verifica que se trata de los restos del Apóstol Santiago y proclama Patrón al Apóstol Santiago del Reino Astur-Galaico. Manda edificar una pequeña iglesia. Esta modesta iglesia la manda reconstruir el Rey Alfonso III, en el año 899, y es la que da lugar a la que hoy en día conocemos como la Catedral de Santiago de Compostela y la ciudad de Santiago de Compostela (Campus Stellae – Campo de las Estrellas).

Catedral de Santiago de Compostela – Sarcófago del Apóstol Santiago

¿Quién fue el Primer Peregrino que visitó la Tumba del Apóstol Santiago?

Tal y como te hemos comentado anteriormente, el Rey Alfonso II el Casto es quien parte caminando desde Oviedo para verificar el hallazgo del eremita Paio. Por lo tanto, se convierte en el Primer Peregrino que visita la Tumba del Apóstol Santiago. Los primeros Peregrinos conocidos del siglo X son el Rey Alfonso II el Casto, el Rey Alfonso III el Magno que hace el recorrido por primera vez en el año 872. Regresa dos años más tarde con la Reina Jimena y donan al Apóstol Santiago una cruz de pedrería y oro (emblema del Reino de Asturias). También en el siglo X destacan los siguientes Peregrinos: Rey Ramiro II, Obispo Gotescalco de Le Puy y el Abad Cesáreo del Monasterio de Santa Cecilia de Montserrat en Cataluña.

Camino Primitivo – Oviedo – Monumento Primer Peregrino del Camino de Santiago – Alfonso II el Casto

Peregrinación a Santiago de Compostela

Debido a la situación política que se vivía, resultó ser el momento idóneo para que Santiago de Compostela se convirtiese en un Centro de Peregrinación. Se necesitaba una red de caminos que uniesen el Reino Astur-Galaico con el resto de Europa, de forma que esto ayudase a su consolidación. Así, los primeros Peregrinos llegarían a Santiago de Compostela por el Camino del Norte, entrando por Irún y recorriendo la cornisa cantábrica, la zona más segura en aquel momento.

Muchas son las leyendas que afirman que el Apóstol Santiago fue visto, a lomos de su caballo blanco, en las Batallas de la Reconquista y por ello recibe también el nombre de Santiago Matamoros. Favoreciendo así que la Reconquista permitiese trazar un itinerario más meridional y dando origen al Camino Francés, que atravesaría las capitales del Reino de Navarra, el Reino de Castilla y el Reino de León.

Camino de Santiago Francés – Etapa Roncesvalles-Logroño

¿En qué se convirtió el Camino de Santiago de Compostela?

El Camino de Santiago se convirtió en una de las rutas más transitadas de Europa. Esto fue debido a la inversión económica tanto de Reyes como de la Iglesia Católica; en las infraestructuras del Camino de Santiago y a su promoción. Esto también se vio favorecido por otros hechos, como las invasiones turcas que interrumpieron el Peregrinaje a Jerusalén.

De esta forma, el Camino de Santiago se convirtió en el gran evento cultural y religioso del continente. Se convertía en el destino por excelencia junto con Roma y Jerusalén. Se llega a hablar de 250.000 Peregrinos anuales durante los siglos XII y XIII.

Desde del siglo XIV la Peregrinación a Santiago de Compostela cae en declive debido a la inestabilidad política de la región y las pestes acaecidas sobre la población.

A finales del siglo XX con la Peregrinación del Papa Juan Pablo II a Santiago de Compostela, al ser nombrado el Camino de Santiago como el Primer Itinerario Cultural Europeo y siendo declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, comienza a resurgir el fenómeno, que no ha parado de crecer hasta la actualidad.

Monumento Conmemorativo de la Visita del Papa Juan Pablo II a Santiago de Compostela – Monte do Gozo

Declaraciones Oficiales del Camino de Santiago

Los siguientes Caminos de Santiago fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Esto se debe a que el patrimonio que presentan a lo largo de todas las rutas, 1.500 km en total, es de vital importancia tanto por su historia, como por los edificios, de culto y popular, que ayudan a los peregrinos. Por otro lado, la riqueza inmaterial de su gastronomía y naturaleza hace de cada ruta única en el mundo. En orden cronológico, estas son las siguientes declaraciones:

• 1987: el 23 de octubre el Consejo de Europa declara las Rutas Jacobeas, es decir, los Caminos que te llevan hasta Santiago de Compostela Primer Itinerario Cultural Europeo.
• 1993: el Camino Francés es declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
• 2004: el Camino de Santiago es declarado Gran Itinerario Cultural Europeo por el Consejo de Europa y recibe el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.
• 2015:  el Camino del Norte o Camino de la Costa, el Camino Primitivo, el Camino de Liébana o Camino Lebaniego, el Camino Interior del País Vasco o Camino Vasco del Interior y el Camino de Santiago por La Rioja son declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

¿Por qué las personas quieren hacer la Peregrinación a Santiago de Compostela?

En la Edad Media la decisión de realizar el Camino de Santiago era una decisión libre y personal. En algunos casos era impuesto como castigo por un juez. Las motivaciones más destacadas de la época eran para pedir una gracia, para cumplir un voto o como búsqueda personal de la religión. En aquel entonces los Peregrinos solían viajar en grupo para protegerse, apoyarse y ayudarse unos a otros.

Hoy en día, sigue siendo una decisión libre y personal, peregrinar hacia Santiago de Compostela. Los motivos para hacer el Camino de Santiago son muy diversos: por un motivo religioso, por un motivo espiritual, por cultura… Las causas que llevan a las personas a hacer la Peregrinación a Santiago de Compostela son tan coloridas, diferentes y variopintas como las personas que te encontrarás en el Camino de Santiago. Cada Peregrino tiene su motivación, pero todos tienen el mismo objetivo llegar a la Plaza del Obradoiro, visitar la Catedral de Santiago de Compostela y abrazar al Apóstol Santiago. Al fin y al cabo, se trata de un «Camino de Agradecimiento». Sigue habiendo Peregrinos que viajan en grupo, pero también son muchos los que lo hacen solos.

Catedral de Santiago de Compostela – Plaza del Obradoiro

¿Cuál es el perfil típico del Peregrino que hace el Camino de Santiago?

A día de hoy, se puede decir que no hay un «Peregrino Típico o Tipo«. Todos somos iguales en el Camino de Santiago, independientemente de la edad, nacionalidad, profesión, condición, etc. Hay niños, jóvenes, adultos, mayores… médicos, jueces, abogados, estudiantes, pescadores, barrenderos, camareros, desempleados… españoles, australianos, americanos, sudamericanos, africanos, asiáticos…

Todos caminamos juntos en el Camino de Santiago

En el Camino de Santiago simplemente somos humanos. Personas que estamos compartiendo un mismo Camino que nos lleva al mismo objetivo, pero con diferentes motivaciones. Normalmente, las personas peregrinan para alejarse de la vida cotidiana. Algunas porque han superado un hito en su vida (ejemplo: finalizar una carrera) y otras porque han vivido un momento difícil (fallecimiento de un ser querido, divorcio, desempleo…). Lo que sí te podemos decir es que, para la mayor parte de los Peregrinos, el Camino de Santiago es una forma de «buscar un significado» a ciertos aspectos de sus vidas: ¿Quién soy? ¿Quién quiero ser? ¿A dónde quiero ir? ¿Qué quiero lograr en mi vida?… Recuerda: en el Camino de Santiago nunca estás solo, al menos, estás contigo mismo, ¡nunca caminas solo! (you never walk alone!).

¿Qué me aportará el Camino de Santiago de Compostela?

Sin duda, no solo la «búsqueda de un significado» tiene un papel importante en la Peregrinación a Santiago de Compostela, también lo tiene la fe. No todos los Peregrinos son creyentes, pero si una gran parte y éstos se embarcan en una Peregrinación Cristiana.

El Camino de Santiago te enseña que se necesita muy poco para vivir. La Peregrinación a Santiago de Compostela te ofrece la oportunidad de encontrarte a ti mismo y de limpiar tu alma. Caminarás, te alimentarás, dormirás, reflexionarás y compartirás interesantes conversaciones con otros Peregrinos. Harás las mismas cosas todos los días, pero cada día será diferente. ¡Te darás cuenta que no necesitas nada más que esto y salud para ser feliz!

El Camino de Santiago da más de lo que recibe

A veces querrás que no se acabe el Camino de Santiago, otras veces estarás deseando volver a casa. Conocerás a otros Peregrinos. Algunos los perderás de vista y en el momento menos esperado te los volverás a encontrar. Otros se convertirán en una bonita amistad para toda la vida. El Camino de Santiago no es solo un camino tiene sus ascensos, sus descensos y sus planicies, vamos es como la vida misma. Aprenderás a apreciar nuevamente los pequeños detalles. ¡Es un camino de agradecimiento! El Camino de Santiago no acaba cuando llegas a la Plaza del Obradoiro. Cuando llegas el Camino sigue o, mejor dicho, ahí es donde comienza el Camino de Santiago: el Camino de la Vida…

Catedral de Santiago de Compostela

Santiago de Compostela

Códice Calixtino o Codex Calixtinus

Símbolos del Camino de Santiago

Saludo del Camino de Santiago – Ultreia et Suseia – Buen Camino

Rutas Jacobeas Oficiales del Camino de Santiago

Cómo preparar el Camino de Santiago

Albergues en el Camino de Santiago de Compostela

Ahora, puedes ser tú mismo el que camine por la historia, el arte, la cultura, la gastronomía… Recorre alguna de las Rutas Jacobeas a Santiago de Compostela, ya sea a pie, en bicicleta, a caballo o incluso en barco, seguro que tenemos el viaje perfecto para ti. ¡Ponte en contacto con nosotros estaremos encantados de ayudarte con la organización de tu Camino de Santiago!